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miércoles, 19 de octubre de 2016

Un poco sobre mí

Antes de empezar a hablarles sobre dientes y salud bucal, me gustaría contarles un poco acerca de mí.

Soy hija de una Tierra Exótica, estudiante de Odontología, casi odontóloga, pasante de odontología, la verdad es que hace un año que terminé mis estudios en la la licenciatura de Cirujano Dentista y sigo en proceso de titulación, espero que ya pronto pueda obtener mi deseado y preciado título.

La idea de hacer este blog surgió a partir de un análisis de mí misma y de mi carrera, así como del análisis de las personas que me rodean y lo que se piensa de los dientes y la salud bucal. 

Hace unos días estaba sin nada que hacer en Facebook y miraba mi página de inicio, cuál fue mi sorpresa al leer que a uno de mis primos, más pequeño que yo, le iban a extraer un diente permanente porque le dolía!!!! Sumado a este hecho, tomando mi curso de titulación, en una de las últimas pláticas que tuvimos, que fue de salud pública, nos hicieron ver lo que ya sabíamos, la situación de salud bucal en México y nuestro papel como odontólogos, porque seamos sinceros, muy poca gente se preocupa por la boca, y no pensamos que es parte de nosotros, de nuestro cuerpo y de que lo que le pase repercute en nuestra salud general, y la Odontología, hoy por hoy está orientada a la curación y no a la prevención que es como debiera ser.

Sinceridad en 3, 2, 1...

Análisis sobre mí. Mi historia Dental

Vergüenza pero cierto, a mis 24 años pocas veces he acudido al dentista, y no estoy hablando de ahora mismo que soy casi odontóloga, sino de mis años mozos cuando era una chiquilla (jeje). Mi primera visita al dentista (la dichosa primera visita al dentista que siembra el terror), fue cuando tenía aproximadamente 8 a 9 años que es cuando se deben "caer" los dientes centrales superiores de leche, y fue porque uno de ellos no se me había caído, me inyectaron y el resto es historia... Sí, el terror iniciaba. No voy a hablar de cómo fue que decidí estudiar esto, pero desde esa horrenda visita y al iniciar mi carrera a los 18 años solo había visitado al odontólogo una vez más y fue para hacerme un blanqueamiento, del resto de mi vida, nada, porque además y para suerte mía, mis dientes están derechitos y mis encías nunca sangraron, por suerte más que por técnica, me cepillaba bien los dientes y los daños nunca fueron catastróficos. En mis primeros años de carrera fui conejillo de indias de uno de mis compañeros que era un grado más avanzado que yo, y me repararon unas pequeñas caries que tenía por ahí. Y sí, tenía miedo. 

Luego inician las clínicas y por solidaridad con tus compañeros de clase, empiezan las limpiezas periódicas, el uso del hilo dental y poco a poco vas mejorando en la presentación y el aseo de tu boca como Odontólogo en formación.

Mi historia dental hoy es distinta, como les dije antes, por suerte más que por técnica, y afortunadamente, nunca surgieron daños catastróficos en mi boca y no me pasó gran cosa. Hoy me hago mis limpiezas y me preocupo por mantenerme saludable.

Análisis sobre mi carrera y los demás

 En la carrera, cuando te das cuenta de cómo no cuidabas tu propia boca, y al atender pacientes poco a poco, al escuchar comentarios de la gente de cómo prefieren que les "quiten un diente" antes que salvarlo debido al dolor que sienten, uno como Odontólogo, se percata de que la salud bucal es punto y aparte en la vida diaria, porque nos ocupamos de bañarnos todos los días, de que nuestra ropa esté limpia y nuestros zapatos pulcros, pero está bien si se nos olvida lavarnos los dientes por la noche, o si en todo el día no nos cepillamos. Es como si la boca no fuera parte de nuestro cuerpo, es como si pudiéramos dejarla a un lado al irnos a dormir, como si tener un buen aliento no hablara bien de nosotros mismos.

Porque la visita al dentista se da cuando tienes 15 años y tus dientes están "chuecos" y queremos los famosos brackets y luego cuando eres mayor porque tus dientes están "amarillos" y queremos un blanqueamiento.

Luego pasa lo de mi primo y miro la salud bucal de mis parientes y me pregunto, ¿qué estoy haciendo yo para cambiar esta situación? Porque primos míos más chiquitos que yo, ya tienen tratamientos restauradores grandes de coronas obsoletas, a uno le extraen un diente, mis tíos, abuelos, padres, todos con al menos un diente extraído. Y los que son todavía bebés con problemas futuros porque siguen usando chupetes o tienen hábitos o no les limpian sus dientecitos de leche.

Aclaro que hay sus contadas excepciones.

Este blog surge de esa pregunta... Yo como casi Odontóloga, ¿qué estoy haciendo para lograr que en México la caries ya no sea el primer y más grave problema de salud bucal? ¿qué estoy haciendo para prevenir problemas futuros en salud bucal? y lo más importante,  ¿cómo puedo ayudar?

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